Por Ulisses Cortes
¿Sabías que prestar tu nombre te puede traer problemas?
Te pongo un ejemplo. Imagina que un amigo tuyo de mucha confianza te pide que figures en una nueva sociedad, qué es un trámite de rutina, qué tienen que ir al notario, y accedes a lo que te piden, recuerda que tu nombre y tu personalidad jurídica queda gravada en un acta constitutiva, y por lo cual te acarrea ciertas obligaciones y derechos, pero… ¿crees que hasta ahí queda todo?
No, la respuesta es no, ten en cuenta, que ya disté, CURP, identificación oficial, comprobante de domicilio, y en algunos casos hasta tu firma electrónica, en pocas palabras les has dado tu identidad.
Vamos a pensar que estas personas actúan bien, pero en un futuro por una mala administración tienen un problema de carácter fiscal o legal, tu como socio vas a responder por esos problemas dependiendo del tipo de sociedad en la que participes. Pero si me leíste bien, te repito, “estas obligado a responder por esos problemas”.
Ahora vamos a pensar mal, si tu das tu e Firma, ¿sabías que con esta pueden emitir facturas? Y a la larga perjudicarte, porque solo están acumulando ingresos y muy posiblemente no estén cumpliendo con tus obligaciones fiscales, al no cumplir con el entero y pago de contribuciones correctas, puedes caer en un tema de evasión fiscal.
Es importante, que si vas hacer un trámite de ese tamaño, te cerciores de lo que estás haciendo, lo que estas firmando y sobre todo que tomes la opinión de un profesional para que te dé su visto bueno o alguna sugerencia con el fin de evitar problemas futuros.
Los principales problemas que te pueden acarrear son los siguientes:
- Crédito por instituciones bancarias que no están a tu nombre y tienes hacer frente a ese compromiso.
- Discrepancia Fiscal
- Lavado de dinero
- Evasión de impuestos
Los últimos dos ya son tipificados como actos muy graves.