Una de las primeras decisiones que se toman al emprender un negocio es saber que régimen fiscal se va a tributar, para las personas físicas existen distintos regímenes dependiendo de las actividades de cada contribuyente.
Pero para el 2022 inicia el Régimen Simplificado de Confianza. Este régimen incluye a las personas físicas con actividades empresarial, profesional y de arrendamiento. Lo que busca es reunir al grueso de las actividades en México.
Y de igual manera invita a los que inician operaciones en 2022.
Solo existe una condicionante la cual es que estimen que los ingresos no superen los tres millones y medio en el ejercicio. Para muchos estimar este ingreso es sencillo, porque sus ventas no superen el millón de pesos, pero habrá quienes si estén rosando este monto o incluso superarlo.
La condicionante la encontramos en el segundo párrafo del artículo 113-E de la LISR:
“Los contribuyentes a que se refiere el párrafo anterior que inicien actividades, podrán optar por pagar el impuesto conforme a lo establecido en esta Sección, cuando estimen que sus ingresos del ejercicio no excederán del límite establecido en el párrafo anterior. Cuando en el ejercicio citado realicen operaciones por un periodo menor de doce meses, para determinar el monto a que se refiere el párrafo anterior dividirán los ingresos manifestados entre el número de días que comprende el periodo y el resultado se multiplicará por 365.”
Pongamos el ejemplo:
Una persona inicia operaciones el primero de abril de 2022, y estima sus ingresos mensuales por 249,000.00 mensuales y la suma de días del primero de abril al último día de diciembre es de 375 días.
Entonces multiplicamos 249,000.00 por 9 meses igual a 2,160,0000.00
A estos 2,160,000.00 lo dividimos entre 375 días, nos da como resultado 5,760.00
A este resultado lo multiplicamos 5,760.00 por 365 igual a 2,102,400.00
Como resultado final tenemos a 2,102,400.00 el cual es menor a los 3,500,000.00, con este ejemplo puedes estar en RESICO ya que no rebasas la condicional.